¿Deporte sin calzado? Por qué hacer ejercicio descalzo es tan saludable

La mejora definitiva para tu entrenamiento de musculación.
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Eine Frau sitzt barfuß in einer Hocke Mikel Taboada

Hay muchos deportes que puedes practicar descalzo, por ejemplo el yoga, el pilates y el entrenamiento de movilidad. Y no sólo por razones prácticas. Hacer ejercicio descalzo puede ser muy saludable. Así que no es de extrañar que, incluso para hacer musculación, correr, realizar ejercicios con el peso corporal y calistenia se dejen cada vez más las zapatillas en casa. Te contamos por qué deberías probar a entrenar descalzo.

Hablando de no usar zapatillas: ¿has probado alguna vez el entrenamiento con calcetines? Lee aquí cómo funciona el ejercicio en calcetines y por qué es extremadamente eficaz.

Menor riesgo de provocar molestias físicas

Demasiado ajustadas, demasiado grandes, sin suficiente amortiguación: la mayoría de las zapatillas deportivas no se ajustan de forma óptima. Lo que mucha gente olvida es que un calzado inadecuado puede causar algo más que molestas ampollas. Incluso una mínima tensión o puntos de presión incorrectos pueden tener efectos negativos en el resto del cuerpo, desde el tendón de Aquiles hasta la articulación de la rodilla y la columna vertebral. Por supuesto, puede haber otras razones para las quejas individuales, además del calzado “equivocado”. Pero vale la pena prescindir en ocasiones de las zapatillas para hacer deporte y cargar el pie de forma natural.

Lee más: ¿Correr descalzo? Descubre aquí por qué tus pies son las mejores zapatillas.

Mejora del equilibrio mediante el entrenamiento descalzo

Unas zapatillas bien ajustadas y con una suela firme proporcionan estabilidad y apoyo. Sin embargo, si entrenas descalzo, tu cuerpo tiene que encargarse de esta tarea, más concretamente tus músculos. Especialmente el core, es decir, los músculos centrales del torso, tienen que estabilizarse permanentemente para que puedas mantener el equilibrio. Prueba a ponerte de pie sobre una pierna primero con zapatillas y luego descalzo. Esto último resulta mucho más inestable. Mediante un entrenamiento regular con los pies descalzos, puedes fortalecer tu equilibrio y mejorar tu conciencia corporal al mismo tiempo. Lee en este artículo por qué es tan importante un buen sentido del equilibrio.

Mayor uso de la musculatura

¿Sabías que en los pies interactúan 20 músculos diferentes? Aparte de más de 100 tendones y ligamentos, 28 huesos y más de 30 articulaciones. Si únicamente haces deporte con zapatillas, sólo utilizas una mínima parte de todo eso. Por tanto, el entrenamiento descalzo activa más músculos del cuerpo que cuando se hace deporte con calzado. Y no solo hablamos de los músculos de los pies, sino también de los músculos de las pantorrillas, que muchas veces descuidamos, además del core. Así que si quieres aprovechar mejor tu entrenamiento, no utilices zapatillas de vez en cuando.

Para algunos deportes, el calzado resistente es, por supuesto, imprescindible. Entre ellos están la halterofilia, el boxeo y los deportes de pelota.

Tu cuerpo se merece una recompensa por el mayor esfuerzo muscular: para que los músculos se regeneren y crezcan, necesitan muchos nutrientes como los que se encuentran en los Recovery Aminos.

Practicar ejercicio descalzo fomenta la propiocepción natural del cuerpo

Desde un punto de vista evolutivo, correr descalzo es lo más natural del mundo. Aunque con el paso del tiempo, nuestros pies y todo nuestro sistema musculoesquelético se han adaptado a llevar zapatos. Los científicos* parten de la base de que el cambio en las técnicas de caminar y la falta de percepción de la profundidad provocan que los pies se vuelvan inflexibles a largo plazo. Esto, con el tiempo, puede provocar problemas físicos. Por eso, tiene mucho sentido movilizar los pies desde la punta hasta el talón mediante el entrenamiento descalzo y fomentar así tu conciencia corporal natural o propiocepción.

Es importante que la superficie se adecúe al ejercicio y esté suficientemente amortiguada. Un suelo demasiado duro o irregular aumenta el riesgo de sufrir lesiones si no llevas zapatillas.

Consejo: Si te resulta incómodo hacer ejercicio descalzo, también puedes empezar con calcetines antideslizantes o zapatillas de dedos separados.

Para saber más sobre este tema en foodspring:

Fuentes del artículo

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