Alimentación consciente: los 6 errores más comunes

¡Y por qué es buenísimo comer simplemente por disfrutar!

4 min

©Klaus Vedfelt

Por Leyla Spiesky

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Desayunas cuando vas en el transporte público camino al trabajo. Cenas en el sofá viendo tu serie favorita. ¿Te suena? El caso es poner la concentración en cualquier cosa menos en lo que estás comiendo. Nuestro día a día está lleno de estímulos que hacen que no prestemos atención a lo que comemos, por qué lo hacemos y cuándo estamos saciados. ¿La solución? Intentar comer de forma consciente, centrándote en el aquí y ahora.

La alimentación consciente (conocida como mindful eating o mindfoodness en inglés) significa ser “consciente” de las sensaciones fisiológicas y emocionales que experimentamos al comer. En concreto, se busca poner atención a la experiencia de pensamientos, emociones, sensaciones físicas y conductas que tienen lugar antes, durante y después del acto de comer.

Comer de forma consciente conlleva hacer un cambio en la manera en la que interactuamos con la comida; significa no juzgar o condenar nuestro comportamiento, disfrutar de la comida y darle al cuerpo los nutrientes que necesita. En vez de pensar “¿Puedo comerme otra porción?”, hazte preguntas como “¿Sabe bien la comida?”, “¿Me llena?”, “¿Cómo se siente mi cuerpo después?”.

Escuchar a ti cuerpo tiene muchos efectos positivos. Esto es justo lo que muestra esta revisión bibliográfica de 2017. Según este artículo, la alimentación consciente mejora nuestro comportamiento al comer. En concreto, los participantes de ese estudio comieron más lentamente y se sintieron saciados antes al comer de forma más consciente. Además, hay otros estudios que señalan que la alimentación consciente es la solución contra el hambre emocional. No obstante, hasta ahora no existe una definición oficial del término y cada estudio utiliza criterios diferentes para medir esta forma de alimentación. Por lo tanto, los resultados deben contemplarse siempre en el contexto del estudio específico.

¿Tienes ganas de enfrentarte a un reto? Coge una de nuestras barritas de proteicas con extra de chocolate e intenta comértela despacio, disfrutándola. No es tan fácil, ¿verdad? La alimentación consciente es algo que hay que practicar y todo el mundo necesita su tiempo. Sigue leyendo si quieres saber cuáles son los 6 errores que debes evitar.

#1 No confundas la alimentación consciente con un tipo de dieta

Comer de forma consciente es un proceso que da sus frutos a largo plazo y que nos ayuda a tener una vida más saludable. Comer despacio y con todos nuestros sentidos, masticar bien y disfrutar de la comida son solo algunas de las pautas que se deben seguir. No confundas estas pautas con reglas firmes: la alimentación consciente no pretender ser una dieta estricta, sino una ayuda para despejar tu mente.

#2 No pienses que comer es algo malo

Ten en cuenta una cosa: comerás galletas cuando te apetezca y comerás más cantidad de la que pensabas. Y eso no es nada malo, siempre y cuando no juzgues este comportamiento de forma negativa. Si quieres aprender a escuchar más a tus sensaciones, lee este artículo sobre la alimentación intuitiva.

#3 Date tiempo

¿Qué haces cuando quieres aprender un deporte nuevo? Te das tiempo y entrenas con regularidad. Pues lo mismo tienes que hacer si quieres aprender a comer de forma consciente. Recuerda que, al igual que pasa cuando queremos hacer cualquier cambio en nuestra dieta, el objetivo es convertir nuestro nuevo comportamiento en un hábito.

#4 Comprométete

Es muy importante que te comprometas al 100% si quieres comer de forma más consciente. ¿No sabes cómo empezar? En primer lugar, te recomendamos que te deshagas de todos aquellos factores que se pueden interponer entre tú y tu camino al éxito. Aquí te dejamos un pequeño ejercicio que te puede ayudar:

Concéntrate en la comida
Mastica lentamente y tómate tu tiempo
Suelta la cuchara o el tenedor para hacer pausas
Come poniendo en ello todos los sentidos: fíjate en el color, el olor y la consistencia de tu comida. ¿Qué sonidos escuchas al masticarla?
¿Te ha gustado la comida?
¿Te ha saciado?
¿Cómo te sientes después de comer?

#5 No seas muy estricto contigo mismo

¿Tienes una comida con tu jefe o tienes alguna visita en casa? No todas las situaciones son perfectas para comer de forma consciente. No seas muy duro contigo mismo y recuerda que el hecho de observar una situación de manera neutral y sin juzgar ya es un comportamiento consciente.

Más información: Mindfulness para encontrar la paz interior y mejorar tus relaciones.

#6 No te fijes en el peso que marca la báscula

El número que aparece en la báscula no es importante; lo que cuenta es cómo te sientes por dentro. ¿Quieres comer de forma consciente porque quieres perder peso? Pues déjanos decirte que el objetivo de este tipo de alimentación no es ese, sino que estés más en sintonía contigo y con lo que eliges comer. Sí que es cierto que por el camino se suele comer cada vez más alimentos sanos y ricos, y esto posiblemente se note en la báscula, pero es solo otro efecto positivo de este tipo de alimentación.

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Fuentes del artículo

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