Ya se sabe que el azúcar no es bueno y que la Navidad no cambia por desgracia este hecho. Aquí te explicamos las consecuencias del consumo de dulces navideños en tu cuerpo. En tu mano está evitarlas.
Estos son los 6 efectos de los dulces navideños en tu cuerpo
1. Destruir tu sensibilidad corporal
Tengo hambre. ¿Otra vez? O quizá no. En realidad, estás lleno. Pero sientes que no. El picoteo constante de dulces con mucho azúcar y pocos nutrientes altera tu cuerpo.
Esto implica que no puedas diferenciar bien entre el hambre real y el antojo de dulces. ¿Las consecuencias? Un círculo vicioso en el que siempre tienes ganas de comer dulces.
2. Poner en riesgo tu salud
Es cierto que suena un poco dramático. No vas a enfermar por culpa de un par de galletas, pero también es cierto que los dulces navideños contienen muchas grasas trans y que un consumo excesivo de estos dulces es perjudicial para tu corazón.
Por eso deberían suponer como mucho un 1% de nuestro consumo calórico diario. Esto implica que, en caso de tener una necesidad diaria de 2000 kcal, puedes comer entre 5 y 10 galletas de Navidad. Calcúlalo tú mismo.
3. Bloquear el hambre de alimentos saludables
Un polvorón, un trozo de tarta o de roscón de reyes o un vaso de grande de cerveza suponen entre 350 y 450 kcal. Casi tanto como un plato de verduras con tofu o pollo. Esta alternativa más saludable no tendrá por desgracia cabida en tu estómago si has estado comiendo dulces.
¿Qué le has aportado a tu cuerpo? Hidratos de carbono malos (harina de trigo, azúcar) y grasas no saludables. ¿Qué deberías haberle aportado? Fibra, vitaminas, hidratos de carbono complejos, grasas saludables y proteínas.
4. Perturbar tu equilibrio calórico
No hace falta decir mucho más. Tanto los dulces como los festines navideños contribuyen a esta perturbación. Teniendo esto en cuenta, quizá sea tiempo de ponerse a plan.
5. Irritar tu piel
Si comes chocolate te saldrán granos. ¿Suena a cliché? Nosotros creemos que no. Científicos holandeses afirman que el chocolate provoca reacciones en el cuerpo que facilitan la aparición de granos, empeoran el acné o ralentizan su desaparición.
6. Y a pesar de todo te sientes contento, ¿no?
Cierto. La grasa y el azúcar estimulan el sistema de recompensa de nuestro cerebro ya que se liberan dos neurotransmisores: la dopamina y la endorfina, la hormona de la felicidad. Según estudios científicos, la percepción háptica producida por el chocolate derritiéndose en tu lengua produce una sensación de felicidad. Aparte de todo esto, siempre es un placer comer dulces.
Pero si prestas atención a lo que te dice tu cuerpo, sabrás que lo que mejor le sienta no es precisamente el turrón de chocolate. Encontrar el modo de averiguar lo que a uno le sienta mejor depende sin embargo de uno mismo.
Conclusiones
- Los dulces navideños alteran nuestra sensación de hambre habitual generando así ataques de hambre.
¿Qué puedes hacer para evitarlo? Evitar picar continuamente y tomar descansos entre las comidas y el picoteo. Opta por frutos secos y bayas, frutas y galletas integrales. - Los dulces navideños contienen hidratos de carbono malos y grasas no saludables.
¿Qué puedes hacer para evitarlo? Dales preferencia a los snacks saludables como las frutas y los frutos secos. Los dulces caseros como las galletas proteicas son también una buena alternativa. - Los dulces navideños te quitan el hambre de comida saludable.
¿Qué puedes hacer para evitarlo? Esperar 20 minutos después de haber comida para picotear. En ese momento te sentirás más saciado y comerás menos. - Los dulces navideños te irritan la piel.
¿Qué puedes hacer para evitarlo? Trata de comer la menor cantidad de azúcar y de dulces posible. Disfruta de un chocolate de calidad. Nuestro souflé de chocolate proteico es una buena sabrosa alternativa al chocolate puro y te aporta en comparación nutrientes de calidad.