Cómo estar más conectados gracias al yoga: entrevista con Sara, profesora de yoga

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Eine Yogalehrerin praktiziert Yoga ©Blue Bamboo Studio

Concentrarnos en el aquí y ahora, desprenderse del estrés de la vida cotidiana y mover el cuerpo guiándonos por nuestra respiración: todo esto es posible gracias al yoga. Además, también mejora la relación que tenemos con nosotros mismos y con los demás, y refuerza nuestro sentimiento de comunidad. Esta disciplina milenaria no consiste en intentar ser el mejor, sino en el propio crecimiento y desarrollo de cada uno. 

Pero, ¿cómo se empieza a practicar yoga? ¿Qué filosofía de vida hay detrás? ¿Y cómo puede afectar la práctica del yoga a nuestro bienestar mental? Sara Ciscar, instructora de yoga en la plataforma de formación digital Blue Bamboo Studio, responde a todas estas preguntas y a muchas más.

Sara se especializa en yoga Vinyasa, una de las modalidades más dinámicas del yoga. También es auxiliar de vuelo y una gran aficionada a los deportes. Impartir clases de yoga en Blue Bamboo Studio le permite seguir conectada con quienes la rodean y mejora su bienestar.

Yogalehrerin Sara sitzt in der Lotus Pose
©Blue Bamboo Studio

El yoga no entiende de edades ni de sexos, además de que está perfectamente indicado para cualquier nivel fitness. ¿Cómo es que esta práctica es capaz de aglutinar adeptos con unos objetivos tan variados? ¿Qué tres motivos encuentras para animar a cualquier persona a practicar yoga?

En ello reside la cercanía y simpleza que nos trae el Yoga, que al trabajar con dos herramientas básicas como son el cuerpo y la respiración, la puerta está abierta para todo el mundo. Así que, si contamos con esto, ya tenemos un motivo para lanzarnos a probar, olvidarnos de cualquier exigencia y liberarnos de obligaciones como ser más flexibles, entender mejor el yoga… Todo esto nos ayudará a conectar mejor con la intención de movernos con consciencia, en vez de estar pendiente de cuánto soy capaz de estirarme, etc. Por último, les animaría a que se pregunten, “¿y por qué no?” 🙂

¿Desde cuándo practicas yoga? ¿cómo descubriste que podía ser bueno para ti?

Empecé practicando eventualmente por curiosidad, siempre me ha gustado mucho el deporte y esto me llevó a probar varias disciplinas, pero el yoga me enamoró, creo que deja un poso dentro de ti, por pequeño que sea. Un poso que, por poco que hayas practicado, te hace saber en qué medida exactamente mejora tu vida. En mi caso empecé a sentir más consciencia al trabajar con mi cuerpo, mejoras en la respiración y, por ende, una mente más calmada.

El yoga une cuerpo y mente como ninguna otra disciplina deportiva. Cada postura cuenta con un significado y refleja un estado mental concreto. ¿De qué forma influye el yoga en nuestra salud mental?

Influye creando espacio interior para ser más conscientes de mirar hacia dentro, ver qué hay ahí…, ver cómo nos sentimos hoy y hacer de nuestra práctica una herramienta de autocuidado en la que, a través de las diferentes posturas, rectificamos nuestras propias malas posturas del día a día y aliviamos tensiones que ni siquiera sabemos que llevamos encima. Cuando paramos, escuchamos y respiramos la mente se alivia y encontramos esa armonía en nosotros que nos ayuda a relativizar las preocupaciones. Por corta que sea la práctica 😉

¿Ha habido fases o momentos duros en tu vida en los que el yoga te ha aportado una mayor fortaleza o apoyo? ¿De qué forma lo hizo?

Sí, practicando más a menudo puedes observar cómo influye la practica en ti dependiendo del estado de ánimo que tengas ese día y son en los días o momentos más bajitos donde yo encontré un bálsamo, una herramienta en la que apoyarme.

Encontré que por muy estancada y preocupada que me encontrara, durante la práctica daba espacio a sentir (fuera lo que fuera); a veces, lágrimas; a veces, frustración, o quizás un apoyo, como un abrazo amigo que te dice que todo está bien.

Nunca recoges la esterilla de la misma manera en que la extendiste.

¿Cómo te convertiste en profesora de yoga? ¿Qué es lo que más te gusta de esta actividad, y qué papel juega en las clases el sentimiento de comunidad?

Me reinventé durante el confinamiento, ya que soy azafata de vuelo, y ya que por el momento no podía ejercer, encontré en el yoga otra de mis pasiones, además de las ganas por compartir todo lo que esta disciplina me hace sentir, cómo me transformó a mí y cómo encontramos en los demás el mismo proceso en diferentes niveles. Ahora incluso encontrando una comunidad de manera online.

Blue Bamboo Studio suele ofrecer diferentes encuentros y retiros en los que los alumnos entrenan, al mismo tiempo que se relacionan entre ellos. ¿Qué importancia tienen estos eventos para los participantes, y por qué este tipo de reuniones ejerce un efecto positivo sobre ellos?

Blue Bamboo es una Plataforma de yoga y entrenamiento ONLINE, donde creemos que las personas y la comunidad son lo más importante para sentirte motivado/a en el día a día.

Organizamos retiros y eventos para conectar con las personas de forma presencial y así poder transmitir los valores de nuestra marca.

Yogalehrerin Sara beim Unterrichten von Yoga
©Blue Bamboo Studio

¿Cómo es un día normal en tu vida? ¿Tienes algún ritual o rutina que no pueda faltar en tu día a día?

Con las clases de yoga en diferentes horarios y días, la rutina que me encanta hacer y realmente me centra es madrugar y regalarme las primeras horas del día para mí, en silencio. Prepararme un buen desayuno con un bonito café, sentarme con mi agenda a observar qué tengo que hacer para ese día, ajustar los quehaceres en la medida de lo posible y mimar a mi gato para que me ayude con su ronroneo a transmitirme paz.

Con la mente más centrada en cómo voy a dirigir mi día, ordeno la casa y me preparo para ir al gimnasio, donde combino entrenamiento de fuerza con mi auto práctica de yoga para terminar relajando los músculos y la mente.

Una alimentación equilibrada es la clave para alcanzar el bienestar físico y mental. ¿Tienes algún producto preferido de foodspring que te guste tomar antes o después de practicar yoga?

Toda la gama de cocina fitness es lo que más me gusta, en especial las cremas proteicas, que están espectaculares y que añadidas a las tortitas quedan buenísimas.

Eso sí, para después de una práctica de yoga, o bien entre clase y clase, opto por una barrita. Mi favorita es la de avellanas y amaranto.Jetzt Saras Lieblingsriegel entdecken

Detrás del yoga se esconde algo más que un simple entrenamiento para cuerpo y mente. Es toda una filosofía de vida. ¿De qué forma ha influido en tus propias perspectivas vitales? ¿Qué efecto tiene el yoga sobre la forma que tenemos de relacionarnos con los demás y con nosotros mismos?

Como bien dices, es una filosofía de vida.

Cuanto más vas practicando, más va creciendo en ti esa consciencia de darte cuenta de que no podemos controlarlo todo, que es necesario salirnos de nuestro diálogo mental en círculos y fluir más con la vida. Adquirimos la consciencia de pertenecer a algo más grande, y al entender esto, aparte de sentir ese alivio de poder confiar en la vida, vamos extrapolando fuera de la esterilla todos los aprendizajes, cada uno a su ritmo; no tienen por qué darse todos a la vez.

Realmente, el yoga es un camino de autoconocimiento. Tú eres quien mandas y guías, en tu mano está observar los beneficios que se producen en ti y en los demás, sintiéndote más integrado con tu círculo e incluso más conectado hacia el mundo por el hecho de ir desvelando tu propósito.

Muchas veces nos dejamos llevar por el estrés de nuestro día a día. ¿Puedes recomendarnos algún ejercicio o técnica de respiración que nos sirva para calmarnos en estos momentos de agitación interior?

¡Claro! Algo muy sencillo que a mí me sirve, y que se puede realizar en cualquier lugar, es observar algo de tu alrededor. Puede ser el cielo, un árbol, mirar por la ventana, levantar la vista… Observar sin juzgar y tomar UNA respiración profunda. Suena a tópico, pero funciona. Concéntrate solo en UNA respiración, sin mayores expectativas, inhalando todo lo largo y profundo que puedas y exhalando despacio y suavemente. Tu cuerpo responderá con la inercia de volver a respirar de esa forma, y seguramente tomarás tres o cuatro respiraciones más de este tipo. Esto te ayudará por unos momentos a salir de tu mente y a tomar perspectiva.

¿Qué consejo le darías a alguien que nunca ha practicado yoga pero que debería empezar cuanto antes? ¿Cuál es la mejor forma de empezar? ¿Qué aspectos hay que tener en cuenta?

Le diría que recuerde los inicios del aprendizaje de algo que ya tuviera integrado, que se apoye en las sensaciones de ir paso a paso, que no se compare constantemente con otros porque el yoga es para todos. Y que, sobre todo, practique con intención y sin exigencias.

No es necesario practicar y abrirse de piernas, es necesario que conectes con tus propias sensaciones y ahí es donde reside la simpleza y la belleza de lanzarse a probarlo.

Se ha de tener en cuenta cualquier lesión o limitación que se tenga para poder adaptar la práctica y realizarla con seguridad. Para ello, lo mejor es comenzar con un/a profesor/a que les pueda mostrar estos pasos adaptando las posturas y resolver las dudas, además de eliminar los prejuicios que puedan existir sobre esta disciplina.

Ahora, de manera online con BlueBamboo puedes encontrar tu profesor/a más cerca que nunca. Nuestras clases online cuentan con niveles, pack de iniciación y mucha cercanía.

Además, combinamos entrenamientos de diferentes intensidades enfocados a una movilidad saludable.

Sin impactos bruscos y con todas las indicaciones, como si tuvieras el profesor en casa 🙂

Fuentes del artículo

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