Practicar skateboard: guía para principiantes
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©MesquitaFMS
Esta actividad tan veraniega aúna velocidad y diversión y se suele practicar con una comunidad de skaters. No tardarás mucho en aprender lo básico en seguida y en nada de tiempo estarás haciendo acrobacias. ¿Quieres saber cómo ganar velocidad y hacer tus primeros trucos? En este artículo te contamos cómo iniciarte en el arte del skateboard.
¿Qué equipamiento se necesita para hacer skate?
¿Te encanta ver a los skaters subiendo y bajando rampas a toda velocidad y saltando unos pocos metros como si nada? Si vives en ciudades como Barcelona, Málaga, Madrid o Valencia, seguro que te cruzas a menudo con gente de cualquier edad sobre una patineta. ¿Tienes ganas de probarlo tú también? Antes de nada, toma nota de todos los accesorios que necesitas para practicar esta actividad.
Lo primero que necesitas es un monopatín, patineta o skateboard. Se trata de una tabla de entre unos 70 a 80 centímetros de largo y 20 centímetros de ancho y con cuatro ruedas. Tanto el extremo delantero (conocido con el nombre de “nose”) como el trasero (también llamado “tail”) son redondeados y están ligeramente curvados hacia arriba, para facilitar así los trucos. Cuanto más larga sea la tabla, más fácil será mantener el equilibrio sobre ella, pero también será menos manejable y limitará los movimientos. Si quieres elegir la tabla ideal para tu nivel y tus características físicas, te recomendamos que hagas una visita a una tienda especializada, donde te darán consejo profesional sobre tablas y marcas.
Por otro lado, lo mejor es que utilices zapatillas de skate de calidad. Puedes usar calzado deportivo clásico, pero asegúrate de que la suela sea lo más plana y regular posible para manejarte bien.
Para curarse en salud, también es muy común llevar coderas, rodilleras, muñequeras y casco.
Consejo de nuestra redacción: Si quieres saber más sobre los diferentes tipos de tablas, en este artículo hablamos de las diferencias entre un longboard y un skate.
¿Qué se trabaja al hacer skate?
Lo primero que tienes que tener en mente es que un longboard sirve para recorrer distancias más largas y que el skate está destinado a hacer trucos. Con el skate, no se trabaja tanto la resistencia, sino más bien la fuerza y el equilibrio. Por ello, este es un deporte que trae muchos beneficios, entre ellos, ayuda a desarrollar los músculos, en especial el core o núcleo, que debe estar activo en todo momento para mantener la estabilidad. También han de estar en tensión los glúteos y los muslos, ya sea porque hay que tomar impulso con un pie, para recorrer grandes distancias en la ciudad sobre la patineta o para saltar.
Se trata de un ejercicio perfecto para mejorar la coordinación y la capacidad de respuesta. Además, te puede ayudar a estabilizar las articulaciones, fortalecer el sistema muscular y mejorar la postura y la conciencia corporal gracias al entrenamiento continuo del equilibrio.Descubre las cookies proteicas para llevar
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Por último, pero no menos importante, el skate es un deporte muy sociable y divertido. Da igual el lugar: ya lo practiques en un skatepark o en las calles de tu ciudad, seguro que conocerás constantemente a gente con la que compartes la misma pasión y la cultura deportiva. La idea de comunidad es muy importante entre los skaters: no hay categorías de mejores y peores, sino que lo más importante es motivarse y divertirse con los demás.
Consejo de nuestra redacción: ¡Trabaja tu equilibrio con estos ejercicios y conquistarás el skatepark en poco tiempo!
¿Hasta qué punto es peligroso hacer skate?
No solo se caen los principiantes, sino también quienes practican desde hace tiempo, porque hacer un movimiento o truco complicado puede desembocar fácilmente en el suelo. Por eso, el riesgo de lesiones es alto. Los cardenales, arañazos y otras marcas aparecen en el cuerpo sí o sí. Además algunas personas sufren lesiones como huesos rotos, ligamentos desgarrados y conmoción cerebral.
Que no te invada el estrés: el peligro de este deporte se puede minimizar gracias a tener cuidado y protegerse adecuadamente. Es muy recomendable llevar casco, coderas y rodilleras para minimizar el riesgo. Elegir un lugar con el tipo de suelo adecuado también ayuda: practicar skate en superficies planas es menos peligroso que patinar en sitios arenosos, húmedos o aceitosos.
¿Para quién está indicado el skateboarding?
En términos generales, todas las personas con buena salud pueden aprender esta actividad. Una persona con algo de experiencia en el surf, el snowboard o el longboard jugará con ventaja, ya que el cuerpo estará familiarizado con los movimientos y el estilo deportivo.
Los principiantes con una musculatura bien entrenada también van un paso por delante. Además del skate, conviene hacer otros deportes o tener una rutina de entrenamiento. Aquí tienes algunos de los mejores ejercicios para el core.
Si sufres problemas graves de espalda o en las articulaciones, mejor olvídate de los deportes de tabla, porque existe un alto riesgo de caerse al practicar skate. Ya sabes, la salud es lo primero.
Aprender a hacer skate: 7 consejos
Al practicar skate por primera vez, muchos de nosotros creemos que será imposible poder hacer algún movimiento sobre la patineta y recorrer largas distancias. Las tablas parecen muy inestables y llegar a ciertos lugares resulta casi un sueño. Qué estrés, ¿no? Bueno, en realidad, en este deporte todo es cuestión de paciencia. Con el tiempo, la práctica y la información adecuada, ganarás cada vez más confianza y habilidades y disfrutarás al máximo de todos sus beneficios.
Te traemos una lista de siete consejos para iniciarte en el arte del skate:
1. Adopta una buena postura inicial
Antes de lanzarte a las calles con tu skateboard, asegúrate de tener la estabilidad que necesitas sobre la tabla. Busca una superficie estable en un lugar donde el skate no pueda rodar, como el césped. El pie delantero es la pierna de apoyo y se encarga del equilibrio. El pie trasero sirve para dar impulso. La posición básica consiste en mantener las piernas separadas al ancho de los hombros y sobre los dos ejes.
¿Qué pie va delante? Cierra los ojos y déjate caer hacia delante. El pie que usas para dar una zancada y no caerte es el que va delante, el de apoyo. Si usas el pie izquierdo, se te llamará “regular” en el mundo del skate; y, si es el derecho, se te conocerá como “goofy“.
2. Añade movimiento
Realiza las primeras pruebas con movimientos seguros en un suelo liso de hormigón. Una ligera pendiente puede serte de ayuda para deslizarte con más facilidad una vez que te des impulso con el pie.
Ya lo tienes: coloca el pie de apoyo justo detrás del eje delantero de la tabla en la dirección de desplazamiento y el pie trasero en el suelo, paralelo al otro. Da una o más zancadas hacia adelante para aumentar el ritmo. El peso del cuerpo recae en el pie de apoyo. Cuando cojas velocidad, coloca el pie de impulso sobre el eje trasero en perpendicular respecto a la dirección de desplazamiento y gira el pie de apoyo para que ambos queden en paralelo.
3. Mantén una postura firme
Cuando estés de pie sobre el skate, dobla ligeramente las rodillas para tener más estabilidad y proteger las articulaciones. Los brazos también ayudan a mantener el equilibrio. El peso del cuerpo se distribuye entre ambas piernas, así que aquí es importante la coordinación. Recuerda también tensar los músculos abdominales e intenta mantener una postura lo más recta posible. Mira en la dirección hacia la que vas.
4. Haz un giro
Si puedes ir de manera segura en línea recta, es hora de pasar a los giros: para hacerlo, lleva el peso del cuerpo hacia los talones o los dedos de los pies para cambiar de dirección. De nuevo, los brazos te ayudan a mantener el equilibrio para ir deslizándote por todos los lugares con estilo.
5. Frena
Para frenar, gira el pie de apoyo en el sentido de la marcha y apoya ligeramente la planta del pie trasero en el suelo. La fricción ralentizará el ritmo, pero este sistema de freno solo es recomendable si no vas a mucha velocidad. Otra alternativa es saltar del tablero, algo que supone una mayor dificultad, pero es cuestión de práctica.
6. Haz tus primeros trucos
¿Sientes seguridad sobre la tabla? ¿Puedes girar y frenar fácilmente? Entonces toca pasar a otro nivel. El ollie es el primer truco que aprende cualquier persona. Para hacer un ollie, comienza colocándote en la posición básica en un lugar estable. Apoya firmemente el pie trasero en la parte de atrás del skate para tocar el suelo con ella. Al mismo tiempo, eleva la parte delantera del pie. El objetivo es levantar la tabla del suelo. Al principio, es difícil para todo el mundo levantar los skates a más de unos centímetros del suelo, pero irás añadiendo calidad a tus saltos después de muchos intentos. Todo es cuestión de práctica, así que cero estrés.
7. Practica en grupo
Haz amigos desde el principio para divertirte practicando trucos y recorriendo las calles juntos. Aunque solo te sepas poner de pie en la tabla, seguro que se te acerca gente para hablar: ¡esa es la magia de este deporte! Unos de los beneficios de practicar skate con otra gente es que un/a skater con más experiencia puede darte consejos para ayudarte a mejorar. ¡Que empiece la fiesta!
Practicar skateboard: conclusiones
- El skate es un deporte de tabla en el que te deslizas sobre un monopatín o patineta con cuatro ruedas y haces trucos.
- Practicar skate es un ejercicio muy completo que aporta muchos beneficios, ya que se trabajan el equilibrio, el core, los glúteos y las piernas, así como la velocidad de reacción y la coordinación.
- Hay muchos tipos de skates: infórmate bien para encontrar la tabla de tu vida.
- El skate es un deporte divertido que se disfruta más en grupo.
- Cualquiera puede aprender este deporte. Tener experiencia con el snowboard, el surf o el longboard supone una gran ventaja. Por cuestiones de salud, no es recomendable para personas con problemas de espalda o articulaciones.
- La protección para las articulaciones y el casco forman parte del equipamiento básico de este deporte.
Fuentes del artículo
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