Yoga para principiantes: claves para tu primera clase de yoga
Te enseñamos las principales claves para una sesión de yoga para principiantes. Toda la información que necesitas para entrar de lleno en el mundo del yoga; ¡con vídeo incluido! Para que empieces ya mismo.
¿Lo primero que se te viene a la cabeza cuando escuchas la palabra “yoga” es gente pasando de una postura imposible a otra? Bueno, esto no es del todo erróneo, pero los que son capaces de hacer correctamente esas posturas de yoga son aquellos yoguis que llevan años poniéndolas en práctica. Puedes usar esta imagen como inspiración o simplemente olvidarla y concentrarte en ti mismo/a.
El yoga es una disciplina física y mental que se originó en la India, y su objetivo fundamental es lograr la unión entre el cuerpo, la mente y el alma. Las posturas de yoga, conocidas como “asanas”, se realizan sobre una esterilla y son el medio para conseguir ese objetivo.
Pero el yoga no es solo esto. Al mismo tiempo, la práctica del yoga es perfecta para entrenar los músculos del core y para mejorar la coordinación y la flexibilidad. Y, por supuesto, para reforzar tu mente.
Si eres nuevo en esto del yoga, te recomendamos que te apuntes a una clase de yoga para principiantes, donde empezarás con posturas lentas y fáciles de hacer. Así podrás poner a prueba tu flexibilidad, además de aprender a ser consciente de tu cuerpo y a respirar al ritmo de cada movimiento. Conseguir ser consciente de tu cuerpo no es algo que te ayudará solo con el yoga, sino también en cualquier otro tipo de deporte.
¿Qué tipo de yoga es el mejor para principiantes?
En realidad, no hay un tipo de yoga diseñado solo para principiantes, sino que es algo que depende del objetivo que tengas. Cada uno de los tipos de yoga tiene opciones para los que lo prueban por primera vez.
¿Quieres algo que sea tranquilo? Entonces, prueba con el yin yoga o el yoga restaurativo, los dos tipos de yoga más relajados; también existe el yoga terapeútico, más enfocado a la sanación y la meditación.
El hatha yoga es uno de los tipos más populares y se caracteriza por una transición suave entre las diferentes asanas.
Por otro lado, con el vinyasa yoga, muy dinámico, sudarás desde el minuto 1. Los ejercicios que se siguen durante la clase dependerán del profesor y del estilo del estudio.
En la mayoría de clases de yoga se realizan las posturas en grupos siguiendo las instrucciones de un profesor a un ritmo armónico. Las asanas y el orden en el que se realizan pueden variar de semana en semana. Sin embargo, esto no es lo normal en algunos tipos de yoga como el ashtanga yoga o el bikram yoga, en los cuales se repite la misma secuencia todas las semanas.
Cada tipo de yoga cuenta con sus asanas específicas. El tipo de clase, el ritmo y el orden de las posturas es diferente según el tipo que se practique.
Ningún tipo de yoga es más o menos adecuado para principiantes. Lo mejor es que te preguntes qué es lo que quieres conseguir al practicar yoga y probar con un estilo específico. Solo recuerda que el yoga es algo con lo que se disfruta y que, aunque creas que no es para ti, nunca está de más salir de la zona de confort y probar cosas nuevas; quizá termines sorprendiéndote y descubras un aspecto que no conocías sobre ti.
¿Cómo empezar a practicar yoga?
1. Encuentra la razón por la que quieres practicar yoga
En ciudades grandes puedes asistir a casi cualquier tipo de clase de yoga: desde el relajado yin yoga hasta el kundalini, más espiritual, o el vinyasa, lleno de energía y movimiento. Pregúntate por qué quieres empezar a practicar yoga y qué necesitas que tenga una clase de yoga o un estudio en concreto para que sea perfecto para ti. Busca estudios de yoga que cumplan con esos requisitos y elige un estilo que se ajuste a tu objetivo.
2. Busca un estudio de yoga
Si es la primera vez que te decides a hacer yoga, lo mejor es que te decantes por hacerlo en un estudio. ¿Por qué? Pues porque es mucho más divertido hacer yoga en grupo y, además, gracias a las instrucciones del profesor, aprenderás a hacer una secuencia de posturas que se adapten al nivel del grupo en particular. Si no consigues hacer alguna postura, tu profesor estará en la clase para echarte una mano y ofrecerte una variante del ejercicio que sí puedas llevar a cabo.
3. Establece una rutina
En ocasiones, el yoga es divertido desde el principio. Pero en otras, lamentablemente, no lo es. Lo cierto es que cuanto mejor sabes hacer algo, mejor te lo pasas haciéndolo. Por lo tanto, recuerda que no debes frustarte si en tu primera clase no consigues que todo vaya como la seda. Tómate tu tiempo para hacer con seguridad las asanas y establece una rutina. Si haces yoga 2 o 3 veces a la semana durante 1 mes, podrás decidir si el tipo de yoga, el profesor y el estudio que has elegido son los adecuados para ti. Si no lo son, haz un cambio.
4. Sé realista
La postura sobre la cabeza (sirsasana) o la del loto (padmasana) no son posturas para principiantes. No te atreverías a correr un maratón solo porque sales a correr media hora todos los días, ¿verdad? Claro que no; es muy posible que algo vaya mal y te hagas un daño que podrías haber evitado. Pregunta en el estudio de yoga cuál es el nivel adecuado para ti y apúntate a la clase del nivel que te recomienden los profesionales.
5. Las comparaciones son odiosas
Es más fácil decirlo que hacerlo, lo sabemos. Pero, ¿por qué te tendrías que comparar con alguien que lleva años involucrado en la práctica del yoga? ¿O por qué deberías sentirte superior a tus otros compañeros de clase porque llevas años haciendo ballet y puedes hacer un spagat con los ojos cerrados? Céntrate solo en ti y en tu propio progreso. El yoga es como cualquier deporte: cada cuerpo es diferente y tiene beneficios para todo el mundo.
6. Practica yoga siempre con cuidado
Los principiantes deberían grabarse esto a fuego: cuando empieces a practicar yoga, hazlo con tranquilidad y lentamente. Roma no se construyó en un día, ¿verdad? Siempre que estés haciendo una postura durante una clase, hazte las siguientes preguntas: ¿Te sientes bien? ¿Todas tus articulaciones están en una posición que no es peligrosa? ¿No te duele nada? ¿Tiene sentido que hagas esa postura? Si respondes a todo que sí, entonces puedes salir de tu zona de confort y hacer la asana más profundamente.
Antes de tu clase de yoga, también tienes que tener cuidado con lo que comes: deja al menos 3 horas entre tu última gran comida y la hora en la que comienza tu clase. También es recomendable que bebas algo caliente antes de empezar: es bueno para el estómago y para el alma. Puedes optar por agua caliente, pero el té está mucho más rico.
7. No te presiones demasiado
Es posible que la primera vez que quieras hacer la postura del perro boca abajo (adho muka svanasana), no puedas estirar las piernas todo lo que deberías. Eso no importa. El yoga para principiantes es la práctica perfecta para entrenar la flexibilidad.
Al igual que en otros tipos de entrenamiento, como el entrenamiento de pesas o de resistencia, por cada ejercicio de yoga existe también una variante más fácil o más difícil. Lo importante es saber encontrar la que mejor se adapta a ti y a tu forma física.
En cuanto se te pase el nerviosismo de la primera clase y sepas hacer las posturas básicas, te darás cuenta de que el yoga ayuda a aquellos principiantes que se atreven a probarlo a mejorar la fuerza y la flexibilidad. Durante una clase de yoga no hay ninguna prisa, trabajas concentrándote en el ritmo de tu respiración y en tu cuerpo, y se crea un espacio en el que te olvidas de tus pensamientos y puedes concentrarte solo en lo importante. Además, muchas clases vienen acompañadas de una sesión de relajación y meditación, por lo que saldrás del estudio con la sensación de estar volando.
8. YouTube vs. estudios de yoga
¿Quieres hacer yoga para principiantes, pero no te apetece ir a un estudio y estar 60 o 90 minutos sobre una esterilla? ¡No te preocupes! Lo único que tienes que hacer es echar mano de YouTube, buscar una secuencia fácil para principiantes y hacerla en casa; no importa si son 5, 10 o 15 minutos.
Sin embargo, recuerda que en este caso se aplican las mismas reglas que si vas a un estudio: elige algo que sea adecuado para principiantes. Olvídate de posturas difíciles y llamativas, que impliquen mucho movimiento; céntrate en hacer posturas básicas de forma lenta y precisa.
Nota: Ten mucho cuidado con los movimientos que ejecutas durante la práctica del yoga en casa. Incluso inclinarte hacia delante o hacia atrás te puede ocasionar problemas en la espalda y la columna vertebral por el mero hecho de realizar la asana incorrectamente. Al no estar en clase y bajo la supervisión de un profesor, tienes que poner el doble de cuidado para asegurarte de que no te haces daño.
Ejercicios de yoga para principiantes
Queremos poner a disposición de todos aquellos que quieren hacer yoga para principiantes los ejercicios básicos que se realizan en la mayoría de las clases de yoga. Es importante recordar que incluso los ejercicios que a simple vista parecen muy fáciles pueden esconder pequeños detalles que se nos escapan. Siempre es bueno prestar atención y verlos más de una vez.
En el siguiente vídeo de Jenny Hirtz, te descubrimos 10 asanas diferentes:
Modelo: Yoflaminga
Yoga para principiantes: conclusiones
- El yoga tiene su origen en la India.
- El objetivo fundamental del yoga es conseguir la unión entre cuerpo, mente y alma.
- Las posturas de yoga se llaman “asanas”.
- El yoga para principiantes implica que te escuches a ti mismo y a tus necesidades.
- Deja la presión a un lado e intenta interiorizar los fundamentos del yoga antes de intentar hacer posturas más avanzadas.
- Elige una clase de yoga para principiantes que se adapte a tu objetivo y a tu nivel físico. La práctica del yoga tiene muchos beneficios, pero cada cuerpo es diferente y necesita cosas distintas; no te presiones y haz las asanas siempre con cuidado.
- Si no quieres ir a una clase en un estudio de yoga, puedes optar por hacer yoga en casa, pero debes prestar especial atención a no hacerte daño durante la práctica.
Fuentes del artículo
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